Rolando Pablos, candidato a la alcaldía de San Antonio, Texas, resaltó la relevancia de México como socio comercial clave en el contexto del nearshoring y busca que la ciudad texana se convierta en un centro de inversión mexicana en Estados Unidos.
“Somos socios, vecinos y amigos. Texas es el principal socio comercial de México, y México, a su vez, es el principal de Texas”, declaró Pablos, originario de Sonora y residente en San Antonio por más de 40 años. A pesar de que el 70% de la población de San Antonio es hispana y de los vínculos de hermanamiento con ciudades como Guadalajara, Monterrey y Ciudad de México, Pablos destacó que aún no se ha aprovechado todo el potencial de la ciudad como destino de inversión mexicana. “No tenemos sedes de multinacionales mexicanas aquí; la mayoría se ha ido a Dallas, Houston y algunas a Austin”, lamentó.
En el contexto del nearshoring, Pablos descartó cualquier competencia entre México y Texas, reiterando la visión de México como un socio estratégico. Recordó el exitoso modelo de maquiladoras o “twin plants” que se implementó en los años 60, y señaló cómo Texas sigue atrayendo inversiones internacionales, incluidas compañías japonesas como Toyota y coreanas como Samsung, que recientemente invirtió 20 mil millones de dólares en Austin para una planta de chips. Además, empresas mexicanas como Arca Continental, Cemex, Gruma, Vitro y Oxxo han fortalecido su presencia en Texas.
Como exsecretario de Estado de Texas y líder del Border Trade Advisory Committee (BTAC), Pablos impulsó la infraestructura fronteriza, logrando integrar a representantes de estados fronterizos mexicanos en proyectos binacionales. “Recientemente obtuvimos permisos presidenciales para ampliar puentes y construir nuevos en Piedras Negras, Brownsville, Matamoros y Laredo”, explicó. Respecto al T-MEC, Pablos se mostró optimista sobre una colaboración más profunda con México y Canadá, aunque advirtió que la creciente inversión china en México podría ser un tema central en las próximas negociaciones.