El cuarto foro anual Mar de Cortés, realizado en Los Cabos, Baja California Sur, concluyó el 15 de noviembre con un renovado compromiso hacia el desarrollo sostenible. El evento reunió a más de 400 líderes de pensamiento, expertos, empresarios y miembros de la sociedad civil de cinco estados: Baja California, Baja California Sur, Sonora, Sinaloa y Nayarit, con el objetivo de encontrar soluciones a los retos ambientales y sociales que enfrentan las áreas urbanas de la región. Dado que el 80% de la población de estos estados vive en las 13 ciudades más pobladas, el tema de este año fue “Ciudades con Futuro”, según comentó Juan Pablo Yamuni Robles, director general del foro, en una entrevista con El Economista.
Las ciudades que bordean el Mar de Cortés enfrentan desafíos compartidos como la urbanización creciente, la contaminación, la sobrepesca y la gentrificación. El foro subrayó la importancia de la innovación sostenible y el diseño en el desarrollo de los centros urbanos de la región. Yamuni destacó la necesidad de brindar certeza a los inversionistas que buscan invertir en la región, y mencionó que parte de la misión del foro es influir en políticas públicas que favorezcan un ambiente adecuado para la inversión, algo que también va de la mano con fortalecer el estado de derecho.
Valeria Moy, directora del Instituto Mexicano para la Competitividad (Imco), hizo un llamado a los organizadores del foro para establecer métricas claras de monitoreo y evaluación que aseguren que los esfuerzos colectivos se traduzcan en acciones concretas.
La región es conocida por sus industrias pesquera y turística, que generan entre US$200 y US$500 millones al año. Sin embargo, el crecimiento de estos sectores no ha sido gestionado de manera sostenible, lo que ha resultado en la disminución de las poblaciones de peces y la degradación ambiental. Yamuni subrayó el potencial del turismo sostenible, así como de la agricultura regenerativa, la pesca y la minería sustentables.
Dennis Frenchman, director del MIT Center for Real Estate, destacó el éxito del Parque Nacional Cabo Pulmo, un parque marino protegido en Baja California Sur, reconocido como Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Frenchman destacó que, durante los 20 años de existencia del parque, la biomasa en la reserva de 71 hectáreas aumentó un 460%, y la economía local diversificó su base, pasando de una pesca en declive a una centrada en la conservación y el ecoturismo.
También mencionó el potencial de las industrias emergentes de arte y medios digitales en la región, especialmente en la histórica ciudad de La Paz, al norte de Los Cabos, que cuenta con una escena artística vibrante.
El gobernador de Sonora, Alfonso Durazo, expresó su satisfacción por participar en el foro Mar de Cortés para hablar sobre el Plan Sonora, un proyecto con beneficios económicos y turísticos para la región. El Plan Sonora se centra en el desarrollo de las industrias de energía renovable y semiconductores en Sonora, una zona ubicada en la frontera de México con los Estados Unidos, en los estados de Nuevo México y Arizona. Se espera que la iniciativa refuerce las relaciones bilaterales entre México y los EE.UU., fomentando la inversión en el nearshoring.
Parte del Plan Sonora es una granja solar fotovoltaica de US$1.6 mil millones en Puerto Peñasco, ubicada al norte del Mar de Cortés. Durante su campaña presidencial, la presidenta Claudia Sheinbaum se comprometió a completar esta instalación, que está siendo desarrollada por la Comisión Federal de Electricidad (CFE), para mayo de 2024. Se espera que sea la mayor planta fotovoltaica de América Latina.