La inflación en México registró un repunte en octubre, alcanzando un 4.76% anual, lo que superó las expectativas del mercado, que preveía una tasa de 4.73%. Este aumento interrumpió una racha de dos meses consecutivos de moderación, impulsado principalmente por los precios de las frutas y verduras, según los datos del INEGI.
Aunque la cifra anual de inflación fue superior a lo esperado, algunos componentes del Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC) sugieren que este aumento podría ser temporal. En particular, la inflación subyacente, que excluye los productos más volátiles, se moderó a 3.80% anual, su nivel más bajo desde diciembre de 2020, acumulando 21 meses de desaceleración.
Por otro lado, la inflación no subyacente experimentó una aceleración, llegando a 7.68% anual, rompiendo dos meses consecutivos de desaceleración. A pesar de este repunte, economistas como Andrés Abadía de Pantheon Macroeconomics anticipan que la inflación continuará su tendencia a la baja en el cuarto trimestre, apoyada por varios factores, incluidos la menor demanda interna y la mejora de las cadenas de suministro.
En términos mensuales, el INPC aumentó 0.55%, el incremento más alto desde 2022, y por encima del 0.52% esperado por los analistas. En cuanto a la subyacente, subió 0.28% mensual, el menor aumento para octubre desde 2020, mientras que la inflación no subyacente repuntó un 1.46%, el más alto desde 2021.
Los precios de frutas y verduras destacaron en el desglose de la inflación no subyacente, con un aumento anual de 15.90%. En términos mensuales, estos productos subieron 4.29%, después de varios meses de caídas. Entre las frutas y verduras con mayores aumentos, destacan la papaya (48.51%), los nopales (47.71%), la calabacita (44.32%) y el pepino (41.62%).
En el segmento de los energéticos y las tarifas gubernamentales, la inflación anual fue de 4.62%, desacelerándose respecto al 6.01% registrado en septiembre.
Aunque los precios experimentaron un repunte, la inflación subyacente, que es clave para entender las tendencias a mediano plazo, mostró señales positivas. Las mercancías registraron un incremento de solo 2.81% anual, el más bajo desde noviembre de 2015, mientras que los precios de los servicios cayeron a 4.98%, su nivel más bajo desde julio de 2022.